Según pasan las cosas
»
Mientras suena “As Time Goes By” en el lugar donde estoy desayunando recuerdo que hace unos días atrás mientras me enviciaba lentamente con esos kioscos que venden películas copiadas, me pidieron que compre Casablanca, “me gustaría verla, nunca la llegué a ver”.
Ojéo la revista “Viva” que se encontraba sobre mi mesa y reparo en que hoy Paulo Cohelo hablando de los deseos que aún le quedan por cumplir para el 2010, menciona que le hubiera gustado tener una cena privada con Nelson Mandela.
Luego recuerdo que al salir del teatro el viernes, de ver la obra “Contrapunto”, con Pepe Soriano y Leonardo Sbaraglia -excepcional, no dejes de verla, Sbaraglia sos uno de mis amores platónicos-, me topé con uno de esos kioscos de piratopelículas en el que adquirí la película dirigida por Clean Esatwood: “Invictus”-basada en el libro El Factor Humano-, la que con la siempre excelente actuación de Morgan Freeman y otros de mis amores platónicos, Matt Damon, trata sobre la historia de cómo un Nelson Mandela apenas liberado de su condena en la cárcel y, ganada la elección presidencial en Sudáfrica, logra algo prácticamente imposible, únir a los “negros” y a los “blancos” en un fín común.
Tras una inteligentísima maniobra política logra que ambos bandos, hasta ese momento “opositores” -no olvidemos que la caida del apartheid era muy reciente-, se sientan del mismo “bando”, a raíz del mundial de rugby de 1995 en Sudáfrica.
Que alguien ose decirme que la vida no es una maraña de circunstancias y hechos que se entrelazan.
Que alguien se anime a demostrarme que no es así, no necesito más que mostrarle los hechos.
Que hablan por sí mismos.
Jime, 10 de enero de 2010, 11:43:07 ART